Una escapada perfecta cargada de vida cultural y mucho ambiente te ofrece esta preciosa ciudad de Castilla. Después de cumplir obligadas visitas como su preciosa Catedral, el yacimiento de Atapuerca, o el museo de la Evolución nada mejor que una ronda por sus calles repletas de tabernas, mesones y cafés deliciosos como " El café de las Artes" donde Luis mima y cuida cada detalle, bares singulares y únicos como "El patillas" repleto de fotos antiguas, carteles de toros, actuaciones magistrales de guitarra... o "El baúl de la Piquer" con la misma esencia pero actual. Cuando llega la hora de llenar la panza "La cantina del Tenorio" es la solución!, su barra de pinchos es espectacular, su carta está repleta de delicias como su mítica patata con aceite y pimentón, ensaladas, huevos ,cecina, hamburguesa de buey , carnes etc. Para cerrar la noche pasate por el Vara café, un local con muchísimo ambiente y una decoración genial, me encantó.
De un tiempo a esta parte mi vida y la de los que me rodean ha cambiado mucho, te das cuenta que cada segundo es para exprimirlo al máximo y una buena forma de exprimir el tiempo de forma positiva es disfrutar de las pequeñas cosas, un guiso, un buen vino, una bonita mesa decorada, un restaurante mágico, una rica receta, una buena compañía o una bella vista. ...A todos los que les guste el arte del buen comer!
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Me gusta Burgos……. yo casi acabo viviendo ahí,luego el destino fue Segovia, pero bonitsa ciudades…...
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